La versión escolar del Penta UC se instaló en 10 escuelas, donde capacitó a profesores y realizó talleres para niños talentosos. Sus buenos resultados se repiten en programas similares de regiones.
Por Pamela Elgueda Tapia, El Mercurio.
Divertido y "bacán" son las palabras que más usa Tomás Cabrera, de 12 años, para describir su experiencia en el Programa Penta para talentos académicos, de la Universidad Católica.
Alumno del Colegio Andes del Sur, de Puente Alto, conoce tanto la versión escolar de Penta, dirigida a niños de 1° a 4° básico, como la que desde hace nueve años acoge a estudiantes de 6° básico a 4° medio.
"Es muy divertido, porque estudio cosas que son de mi gusto. Por ejemplo, en el curso 'Aves de Chile', nos contaron que las aves tienen magnetita en el cerebro, un mineral que les permite orientarse cuando emigran", comenta con propiedad, para luego agregar: "Lo bacán de Penta es que uno se relaja mientras aprende".
Tomás tuvo suerte, porque el Penta UC escolar fue desarrollado, entre 2007 y 2009, como un proyecto Fondef que sirvió de programa piloto.
"Tenemos 25 municipios en convenio y una tremenda demanda", dice Violeta Arancibia, directora del Centro de Estudios y Desarrollo de Talentos, Penta UC.
"Hemos hecho transferencia a otras universidades, pero nos siguen pidiendo. Así que aprovechamos las muchas cabezas pensantes de la UC para ver cómo expandirnos".
La respuesta fue llevarlo a los establecimientos donde están los niños talentosos de menos recursos y pocas posibilidades de potenciar esas habilidades.
Los resultados fueron promisorios y se presentaron la semana pasada en el IV Seminario Internacional "La educación de talentos va al colegio".
"Logramos mucho conocimiento, pero también una experiencia que se puede traspasar a otras escuelas", asegura la directora de la iniciativa escolar del Penta UC que se aplicó en 10 establecimientos municipalizados de Puente Alto.
Cinco fueron usados como grupo de control y los otros como grupo experimental, donde se identificó a 350 niños con talento académico. Además, se capacitó a 60 profesores voluntarios.
Desafíos Diarios
Los talleres de Penta Escolar tenían a alumnos de 4° básico aprendiendo probabilidades y números figurados (aquellos que pueden componerse con la forma de una figura geométrica) o de 3° haciendo una campaña publicitaria para borrar el estigma que persigue a la comuna donde viven, Puente Alto.
"Vimos que los niños aprenden más y eso les enriquece lo que están desarrollando en el aula", explica Piedad Cabrera, doctora en Psicología y quien coordinó la evaluación del programa.
Una idea que fue confirmada por los mismos niños, quienes evaluaron el programa a través de un cuestionario. El resultado fue que el 88% de ellos estuvo de acuerdo en que las clases del Penta escolar eran desafiantes y estimulantes.
Los profesores, en tanto, modificaron sus prácticas pedagógicas para hacerlas más acordes a las necesidades de estos niños.
Eso significó que hicieran clases más motivantes y flexibles no sólo para los niños talentosos, sino que para todos sus alumnos.
"Los profesores fueron capaces de usar técnicas de cuestionamiento donde los niños son los productores de las respuestas. Y lo que vimos es que esto lo aplicaron también en sus clases regulares".
Los padres, en tanto, aumentaron sus expectativas respecto de lo que sus hijos pueden lograr.
"Esto es importante, porque cuando un padre que no terminó su enseñanza media espera que su hijo llegue a tener un doctorado, significa que está dispuesto a hacer muchos sacrificios por ese niño", afirma Carolina Segovia, miembro del equipo investigador y conocida porque es quien elabora la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP).
"Se demostró que la intervención temprana es mucho más productiva y que sus impactos positivos se van sumando en el tiempo", concluye Carolina Segovia.
" Cuando la Presidenta Michelle Bachelet le otorga el sello Bicentenario a Penta UC está diciendo 'estas experiencias se valoran altamente como visión de Estado más que como visión de Gobierno'". Lilia Concha, coordinadora nacional de Ed. Básica del Mineduc
74% de los niños participantes del Penta UC escolar mejoró sus notas en el colegio, según el estudio de impacto hecho por Carolina Segovia.
El 90% quiere continuar en el programa y al 78% ahora le gusta más ir a la escuela.
Expansión a Regiones
La Universidad Católica de Valparaíso es una de las entidades que está desarrollando un programa de talentos académicos en regiones (fruto de una transferencia del Penta UC), junto a la Católica de Antofagasta, la de Concepción, la de La Frontera y la Austral.
La UCV ya tiene resultados de una evaluación que hizo a su programa BETA.
"Vimos que había avances significativos en el pensamiento analítico y su capacidad para resolver problemas", comenta Leonor Conejeros, directora de Beta.
Eso significa, agrega, que la metodología aplicada está desarrollando las habilidades que se propone en los 320 alumnos del programa, quienes provienen, mayoritariamente, de colegios municipalizados de Valparaíso, Viña, Quilpué y Casablanca.
Frutos del Proyecto
"El Penta UC escolar no habría sido posible sin el compromiso del alcalde y la corporación de Puente Alto, de los directores y profesores de los colegios. Ellos hicieron un gran esfuerzo". VIOLETA ARANCIBIA, directora Penta UC
"La gracia del Penta UC es ir de escolar a un ambiente universitario, poder aprender materias más avanzadas que las del colegio, y a cuestionarme e investigar más". VICENTE CABRERA (17), estudiante Penta UC
"Los padres hacen una buena evaluación del programa Penta UC escolar. Y son padres exigentes, quienes no encuentran todo bueno. Evalúan mejor el programa que el colegio". CAROLINA SEGOVIA, investigadora Penta UC
"El programa me gustó porque conocí compañeros de otros cursos. El que dan en San Joaquín es interesante porque se da en un ambiente universitario". TOMÁS CABRERA (12), alumno Penta UC
"Vimos que el programa generó niños talentosos 20% más autónomos, más activos, más capaces de preguntar y contrapreguntar. También, que se sentían gratos en el programa". PIEDAD CABRERA, investigadora Penta UC.
Por Pamela Elgueda Tapia, El Mercurio.
Divertido y "bacán" son las palabras que más usa Tomás Cabrera, de 12 años, para describir su experiencia en el Programa Penta para talentos académicos, de la Universidad Católica.
Alumno del Colegio Andes del Sur, de Puente Alto, conoce tanto la versión escolar de Penta, dirigida a niños de 1° a 4° básico, como la que desde hace nueve años acoge a estudiantes de 6° básico a 4° medio.
"Es muy divertido, porque estudio cosas que son de mi gusto. Por ejemplo, en el curso 'Aves de Chile', nos contaron que las aves tienen magnetita en el cerebro, un mineral que les permite orientarse cuando emigran", comenta con propiedad, para luego agregar: "Lo bacán de Penta es que uno se relaja mientras aprende".
Tomás tuvo suerte, porque el Penta UC escolar fue desarrollado, entre 2007 y 2009, como un proyecto Fondef que sirvió de programa piloto.
"Tenemos 25 municipios en convenio y una tremenda demanda", dice Violeta Arancibia, directora del Centro de Estudios y Desarrollo de Talentos, Penta UC.
"Hemos hecho transferencia a otras universidades, pero nos siguen pidiendo. Así que aprovechamos las muchas cabezas pensantes de la UC para ver cómo expandirnos".
La respuesta fue llevarlo a los establecimientos donde están los niños talentosos de menos recursos y pocas posibilidades de potenciar esas habilidades.
Los resultados fueron promisorios y se presentaron la semana pasada en el IV Seminario Internacional "La educación de talentos va al colegio".
"Logramos mucho conocimiento, pero también una experiencia que se puede traspasar a otras escuelas", asegura la directora de la iniciativa escolar del Penta UC que se aplicó en 10 establecimientos municipalizados de Puente Alto.
Cinco fueron usados como grupo de control y los otros como grupo experimental, donde se identificó a 350 niños con talento académico. Además, se capacitó a 60 profesores voluntarios.
Desafíos Diarios
Los talleres de Penta Escolar tenían a alumnos de 4° básico aprendiendo probabilidades y números figurados (aquellos que pueden componerse con la forma de una figura geométrica) o de 3° haciendo una campaña publicitaria para borrar el estigma que persigue a la comuna donde viven, Puente Alto.
"Vimos que los niños aprenden más y eso les enriquece lo que están desarrollando en el aula", explica Piedad Cabrera, doctora en Psicología y quien coordinó la evaluación del programa.
Una idea que fue confirmada por los mismos niños, quienes evaluaron el programa a través de un cuestionario. El resultado fue que el 88% de ellos estuvo de acuerdo en que las clases del Penta escolar eran desafiantes y estimulantes.
Los profesores, en tanto, modificaron sus prácticas pedagógicas para hacerlas más acordes a las necesidades de estos niños.
Eso significó que hicieran clases más motivantes y flexibles no sólo para los niños talentosos, sino que para todos sus alumnos.
"Los profesores fueron capaces de usar técnicas de cuestionamiento donde los niños son los productores de las respuestas. Y lo que vimos es que esto lo aplicaron también en sus clases regulares".
Los padres, en tanto, aumentaron sus expectativas respecto de lo que sus hijos pueden lograr.
"Esto es importante, porque cuando un padre que no terminó su enseñanza media espera que su hijo llegue a tener un doctorado, significa que está dispuesto a hacer muchos sacrificios por ese niño", afirma Carolina Segovia, miembro del equipo investigador y conocida porque es quien elabora la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP).
"Se demostró que la intervención temprana es mucho más productiva y que sus impactos positivos se van sumando en el tiempo", concluye Carolina Segovia.
" Cuando la Presidenta Michelle Bachelet le otorga el sello Bicentenario a Penta UC está diciendo 'estas experiencias se valoran altamente como visión de Estado más que como visión de Gobierno'". Lilia Concha, coordinadora nacional de Ed. Básica del Mineduc
74% de los niños participantes del Penta UC escolar mejoró sus notas en el colegio, según el estudio de impacto hecho por Carolina Segovia.
El 90% quiere continuar en el programa y al 78% ahora le gusta más ir a la escuela.
Expansión a Regiones
La Universidad Católica de Valparaíso es una de las entidades que está desarrollando un programa de talentos académicos en regiones (fruto de una transferencia del Penta UC), junto a la Católica de Antofagasta, la de Concepción, la de La Frontera y la Austral.
La UCV ya tiene resultados de una evaluación que hizo a su programa BETA.
"Vimos que había avances significativos en el pensamiento analítico y su capacidad para resolver problemas", comenta Leonor Conejeros, directora de Beta.
Eso significa, agrega, que la metodología aplicada está desarrollando las habilidades que se propone en los 320 alumnos del programa, quienes provienen, mayoritariamente, de colegios municipalizados de Valparaíso, Viña, Quilpué y Casablanca.
Frutos del Proyecto
"El Penta UC escolar no habría sido posible sin el compromiso del alcalde y la corporación de Puente Alto, de los directores y profesores de los colegios. Ellos hicieron un gran esfuerzo". VIOLETA ARANCIBIA, directora Penta UC
"La gracia del Penta UC es ir de escolar a un ambiente universitario, poder aprender materias más avanzadas que las del colegio, y a cuestionarme e investigar más". VICENTE CABRERA (17), estudiante Penta UC
"Los padres hacen una buena evaluación del programa Penta UC escolar. Y son padres exigentes, quienes no encuentran todo bueno. Evalúan mejor el programa que el colegio". CAROLINA SEGOVIA, investigadora Penta UC
"El programa me gustó porque conocí compañeros de otros cursos. El que dan en San Joaquín es interesante porque se da en un ambiente universitario". TOMÁS CABRERA (12), alumno Penta UC
"Vimos que el programa generó niños talentosos 20% más autónomos, más activos, más capaces de preguntar y contrapreguntar. También, que se sentían gratos en el programa". PIEDAD CABRERA, investigadora Penta UC.