Además, reduce problemas cardiovasculares en la adultez.
Por Teresita Quezada, La Tercera.
Ir al colegio caminando puede ser muy beneficioso para los niños, según un estudio de la Universidad de Buffalo que demostró que aquellos que lo hacen tienen menos aumentos severos en su frecuencia cardíaca y presión arterial y se sienten menos ansiosos en las evaluaciones y pruebas escolares, lo que mejora su rendimiento.
Los investigadores escogieron al azar 40 niños y niñas, entre 10 y 14 años, y los hicieron ver un diaporama con calles de un barrio en dos diferentes posiciones: unos lo vieron sentados en una cómoda silla, simulando la experiencia de ir al colegio en auto, mientras que otros lo vieron con una mochila puesta y caminando 1,6 kilómetro en una máquina trotadora, para simular la ida al colegio caminando.
Luego del diaporama, a todos los niños se les pidió que se relajaran por 20 minutos, leyendo una revista, y que posteriormente realizaran una prueba rápida que implicaba una pequeña dificultad de concentración.
Los niños que habían caminado en la máquina trotadora mostraron menos signos de estrés físico y menor aumento en la presión sanguínea y frecuencia cardíaca.
Además, tuvieron puntajes más bajos cuando se les preguntó qué tan estresados se sentían frente a la prueba.
"El estudio muestra que el ejercicio puede moderar la reactivación cardiovascular de los niños cuando se ven enfrentados a desafíos cognitivamente estresantes durante la jornada escolar", dicen los investigadores en el Journal de Medicina y Ciencia en Deporte y Ejercicio, donde fue publicado el estudio.
De allí que los expertos postulen que una caminata al colegio de 20 minutos puede ser la fórmula para tener escolares menos estresados y adultos con menos problemas cardiovasculares.
Estudios anteriores han demostrado que la actividad física moviliza las endorfinas, las hormonas que nos hacen sentir bien, libera anticuerpos y neurotransmisores e incluso, promueve la creación de nuevas neuronas resistentes al estrés.
"El ejercicio ayuda a los niños a poner los desafíos en perspectiva", dicen los autores en la publicación.
Por Teresita Quezada, La Tercera.
Ir al colegio caminando puede ser muy beneficioso para los niños, según un estudio de la Universidad de Buffalo que demostró que aquellos que lo hacen tienen menos aumentos severos en su frecuencia cardíaca y presión arterial y se sienten menos ansiosos en las evaluaciones y pruebas escolares, lo que mejora su rendimiento.
Los investigadores escogieron al azar 40 niños y niñas, entre 10 y 14 años, y los hicieron ver un diaporama con calles de un barrio en dos diferentes posiciones: unos lo vieron sentados en una cómoda silla, simulando la experiencia de ir al colegio en auto, mientras que otros lo vieron con una mochila puesta y caminando 1,6 kilómetro en una máquina trotadora, para simular la ida al colegio caminando.
Luego del diaporama, a todos los niños se les pidió que se relajaran por 20 minutos, leyendo una revista, y que posteriormente realizaran una prueba rápida que implicaba una pequeña dificultad de concentración.
Los niños que habían caminado en la máquina trotadora mostraron menos signos de estrés físico y menor aumento en la presión sanguínea y frecuencia cardíaca.
Además, tuvieron puntajes más bajos cuando se les preguntó qué tan estresados se sentían frente a la prueba.
"El estudio muestra que el ejercicio puede moderar la reactivación cardiovascular de los niños cuando se ven enfrentados a desafíos cognitivamente estresantes durante la jornada escolar", dicen los investigadores en el Journal de Medicina y Ciencia en Deporte y Ejercicio, donde fue publicado el estudio.
De allí que los expertos postulen que una caminata al colegio de 20 minutos puede ser la fórmula para tener escolares menos estresados y adultos con menos problemas cardiovasculares.
Estudios anteriores han demostrado que la actividad física moviliza las endorfinas, las hormonas que nos hacen sentir bien, libera anticuerpos y neurotransmisores e incluso, promueve la creación de nuevas neuronas resistentes al estrés.
"El ejercicio ayuda a los niños a poner los desafíos en perspectiva", dicen los autores en la publicación.