El 81,2% cree que hay una mayor aceptación de la diversidad, en relación con generaciones previas.
Por Adriana Tapia, La Tercera.
"El lugar que nos acoge... Un oasis frente a esta vida tremenda". Así definió Verónica Edwards, directora ejecutiva de Adimark, a la familia.
Un espacio que se ha ido modificando y en el que hoy cabe una diversidad de definiciones, según el estudio La Familia del Bicentenario, realizado por ese centro de estudios y dado a conocer ayer.
En él se reflejan los cambios en cómo la sociedad chilena percibe este concepto actualmente y sus transformaciones, en los últimos 20 años.
No hay una sola familia
El estudio refleja un cambio en el dibujo tradicional de mamá, papá e hijos: aunque el 56% señala que el concepto tradicional está compuesto por ellos, hoy se aceptan nuevos esquemas.
Según el estudio -realizado a 605 personas de distintos estratos económicos y ciudades del país-, se considera que son familia los hogares donde se vive con abuelos, primos o familiares (95,5%); los grupos compuestos por hombres en pareja con mujeres mucho más jóvenes (86,5%); donde hay una madre soltera que vive con su hijo o hija (85%), o padres separados que viven con los hijos de ambos (74%).
"El concepto de familia está asociado al concepto comunidad, que es la sensación de estar unidos por metas comunes y por compartir de tal manera que se genere una sensación de unidad y de afecto", define Isidora Mena, sicóloga de la U. Católica.
Cambios en 20 años
Lo anterior refleja un cambio con respecto a generaciones pasadas: el 81,2% señala que hay una mayor aceptación de la diversidad.
De hecho, si hace dos décadas sólo el 28,8% estimaba que los padres separados que viven con los hijos de ambos eran una familia, ahora el salto es radical: 74% lo acepta dentro del concepto familia.
Lo mismo sucede con el esquema de madre soltera que vive con su hijo: antes, sólo el 27,4% los consideraba una familia. Hoy, el 85% lo hace.
El cambio más visible es el de las parejas del mismo sexo: mientras en 1990 apenas un 2,9% estimaba que respondían al concepto de familia, actualmente ese porcentaje se empina por el 32,7%.
¿Qué separa a la Familia?
El quiebre de un hogar está influenciado por varios elementos. El individualismo y la falta de comunicación son considerados los principales responsables.
Sin embargo, estos factores son visiblemente distintos de acuerdo al estrato socioeconómico.
Mientras en los niveles más altos, la falta de comunicación y la falta de tiempo son los más elevados (48% y 34%, respectivamente), en los niveles más bajos los aspectos que separan a la familia son distintos: la violencia (21%) y las drogas, junto al alcohol (33%).
Este resultado es paradójico para Isidora Mena: "Mientras los niveles socioeconómicos más bajos tienen violencia y problemas con las drogas por falta de trabajo, probablemente, los niveles más altos tienen individualismo y poca comunicación por exceso de trabajo".
A pesar de Todo
En la suma y resta la familia sigue siendo importante. De acuerdo con el estudio, ocho de cada 10 chilenos dice estar conforme con su familia.
¿Las razones para encontrar su hogar como el ideal? La unión (39,4%), el afecto (28,3%) y el respeto (18,8%).
De hecho, los vínculos y sentimientos priman por sobre la composición cuando fueron preguntados qué es la familia para los chilenos.
Lo mismo ocurre al consultar qué hace a las familias distintas: los problemas (16,9%) y la falta de preocupación (10,8%) priman por sobre padres separados o madres que crían solas a sus hijos.
Lo que hacen Juntos
"La bandeja es la enemiga de la familia". Esta frase refleja cuál es el eje que une a los miembros de un hogar: compartir la mesa a la hora de la comida.
El 60% de los encuestados señaló que come en la noche en la casa, en la semana, y el 97%, que almuerza con los suyos el fin de semana.
Más: el 93,7% apunta las reuniones familiares, con o sin motivo, como una ocasión que une a la familia.
Por Adriana Tapia, La Tercera.
"El lugar que nos acoge... Un oasis frente a esta vida tremenda". Así definió Verónica Edwards, directora ejecutiva de Adimark, a la familia.
Un espacio que se ha ido modificando y en el que hoy cabe una diversidad de definiciones, según el estudio La Familia del Bicentenario, realizado por ese centro de estudios y dado a conocer ayer.
En él se reflejan los cambios en cómo la sociedad chilena percibe este concepto actualmente y sus transformaciones, en los últimos 20 años.
No hay una sola familia
El estudio refleja un cambio en el dibujo tradicional de mamá, papá e hijos: aunque el 56% señala que el concepto tradicional está compuesto por ellos, hoy se aceptan nuevos esquemas.
Según el estudio -realizado a 605 personas de distintos estratos económicos y ciudades del país-, se considera que son familia los hogares donde se vive con abuelos, primos o familiares (95,5%); los grupos compuestos por hombres en pareja con mujeres mucho más jóvenes (86,5%); donde hay una madre soltera que vive con su hijo o hija (85%), o padres separados que viven con los hijos de ambos (74%).
"El concepto de familia está asociado al concepto comunidad, que es la sensación de estar unidos por metas comunes y por compartir de tal manera que se genere una sensación de unidad y de afecto", define Isidora Mena, sicóloga de la U. Católica.
Cambios en 20 años
Lo anterior refleja un cambio con respecto a generaciones pasadas: el 81,2% señala que hay una mayor aceptación de la diversidad.
De hecho, si hace dos décadas sólo el 28,8% estimaba que los padres separados que viven con los hijos de ambos eran una familia, ahora el salto es radical: 74% lo acepta dentro del concepto familia.
Lo mismo sucede con el esquema de madre soltera que vive con su hijo: antes, sólo el 27,4% los consideraba una familia. Hoy, el 85% lo hace.
El cambio más visible es el de las parejas del mismo sexo: mientras en 1990 apenas un 2,9% estimaba que respondían al concepto de familia, actualmente ese porcentaje se empina por el 32,7%.
¿Qué separa a la Familia?
El quiebre de un hogar está influenciado por varios elementos. El individualismo y la falta de comunicación son considerados los principales responsables.
Sin embargo, estos factores son visiblemente distintos de acuerdo al estrato socioeconómico.
Mientras en los niveles más altos, la falta de comunicación y la falta de tiempo son los más elevados (48% y 34%, respectivamente), en los niveles más bajos los aspectos que separan a la familia son distintos: la violencia (21%) y las drogas, junto al alcohol (33%).
Este resultado es paradójico para Isidora Mena: "Mientras los niveles socioeconómicos más bajos tienen violencia y problemas con las drogas por falta de trabajo, probablemente, los niveles más altos tienen individualismo y poca comunicación por exceso de trabajo".
A pesar de Todo
En la suma y resta la familia sigue siendo importante. De acuerdo con el estudio, ocho de cada 10 chilenos dice estar conforme con su familia.
¿Las razones para encontrar su hogar como el ideal? La unión (39,4%), el afecto (28,3%) y el respeto (18,8%).
De hecho, los vínculos y sentimientos priman por sobre la composición cuando fueron preguntados qué es la familia para los chilenos.
Lo mismo ocurre al consultar qué hace a las familias distintas: los problemas (16,9%) y la falta de preocupación (10,8%) priman por sobre padres separados o madres que crían solas a sus hijos.
Lo que hacen Juntos
"La bandeja es la enemiga de la familia". Esta frase refleja cuál es el eje que une a los miembros de un hogar: compartir la mesa a la hora de la comida.
El 60% de los encuestados señaló que come en la noche en la casa, en la semana, y el 97%, que almuerza con los suyos el fin de semana.
Más: el 93,7% apunta las reuniones familiares, con o sin motivo, como una ocasión que une a la familia.