Pediatras y sus observaciones en las consultas. No saber manejar las pataletas, instalar un televisor en su pieza o no tener un horario definido para hacerlos dormir son algunos problemas frecuentes.
Por Amalia Torres, El Mercurio.
1) TV en la Habitación
"Muchos creen que la televisión relaja, pero la verdad genera el efecto contrario: activa más".
Así explica la doctora Valeria Rojas, neuróloga infanto-juvenil y presidenta del comité de medios y salud de la Sociedad Chilena de Pediatría, la influencia de la televisión en los niños.
Estudios científicos demuestran que tener un televisor en la habitación se relaciona con mal rendimiento escolar, obesidad, aumento del consumismo y trastornos del sueño.
"Lo recomendado es que los niños no se expongan a las pantallas más de una hora y media durante los días hábiles", agrega.
Por eso, ver películas en el auto para "tranquilizar" a los más chicos tampoco es buena idea.
"En la actualidad hay tan pocos espacios de conversación familiar, que hay que aprovechar esos momentos", agrega la experta.
2) Colaciones No Saludables
"No siempre es necesario que los niños tomen una colación entre las comidas", señala el doctor Andrés Muñoz Allendes, pediatra del Hospital Clínico de la U. de Chile.
Sin embargo, si se quiere, se deben evitar los azúcares refinados, los alimentos con sal y las grasas. "Una fruta o porción de leche descremada es lo ideal", dice Muñoz.
3) Sin hora para Dormir
No contar con una hora establecida para ir a la cama no sólo dificulta que el niño concilie el sueño.
Dormirse después de las diez de la noche también puede provocarle trastornos en el desarrollo.
"La hormona del crecimiento tiene un peak a la medianoche, pero para que eso ocurra, los niños tienen que estar durmiendo dos horas antes. Y eso significa tener que acostarlo al menos media hora antes", explica el doctor Muñoz.
Si esta hormona se genera en menor cantidad, existe la posibilidad de que el niño crezca menos de lo que podría hacerlo. Además, el buen sueño permite fijar el aprendizaje, agrega.
4) No saber controlar las Pataletas
Un error común entre los padres, explica el pediatra de la Clínica Las Condes Mauricio Yunge, es no saber controlar las pataletas.
"El hijo tiene que entender que ésa no es la manera adecuada de conseguir las cosas. Y si es necesario, hay que llevarlo a su pieza hasta que se le pase. Los padres tienen que darse cuenta de cuándo quiere manipular".
5) Retar y Gritar
Gritarle no sirve. De hecho, según el doctor Muñoz, es importante explicarle al niño por qué se le dice algo, aunque siempre de una manera sencilla que logre comprender.
También es esencial retarlo en el mismo momento en que comete el error.
"No tiene sentido que llegue la mamá en la tarde y lo rete por algo que hizo en la mañana. Por eso, si el niño está a cargo de otra persona, hay que dejarle claro qué cosas puede hacer y qué no", añade Yunge.
Aprender a reprender también es clave. "No se puede retar a un niño con rabia. Lo primero es calmarse y si es necesario, contar hasta diez", señala.
6) Celulares Infantiles
A la consulta de la doctora Rojas no es raro que lleguen niños de cinco años con celulares.
"El problema es que lo usan para jugar, y entonces termina siendo una consola más, con todos los problemas que esto trae. Además, el juego impide generar momentos de conversación".
Según Rojas, el celular no debería entregarse antes de los 12 años.
7) Criar Genios
Clases de piano, de tenis y reforzamiento escolar pueden no ser tan buena idea si sólo se tiene 7 años.
"Más importante es que el niño sea feliz. Aprender jugando también funciona", dice el doctor Muñoz.
Por eso, recuerda, es ideal permitirles "experimentar y descubrir sus propias capacidades".
Según el pediatra, muchos padres comparan a sus hijos con otros. "Pero hay distintos ritmos de aprendizaje".
8) No Ponerse de Acuerdo
Los niños necesitan que el rayado de cancha sea claro y que ambos padres estén de acuerdo en las reglas.
"Tienen que ponerse de acuerdo; si no, los niños se confunden. Además, es clave que si le prohíben algo un día, se le siga prohibiendo al día siguiente. La consistencia es clave", dice el pediatra de la Clínica Las Condes Mauricio Yunge.
9) Comida fuera de Horarios
Si el niño ya almorzó, no es aconsejable que cuando lo hagan los papás le den trozos de pan o compartan su comida con él. El problema, dicen los expertos, no es sólo el aumento del peso.
"También se genera un hábito inadecuado. El niño relaciona que estar con la familia y pasarlo bien siempre está unido a estímulos alimentarios", dice Muñoz.
10) Dormirse en los Brazos
"Que los niños se queden dormidos en la cama de los papás o en los brazos de la mamá no es buena idea. Tienen que aprender a dormir en su cama", dice Yunge.
Si no, al despertar a la mitad de la noche y no reconocer el mismo lugar donde se durmieron, desconocen y no lograr un sueño reponedor.