Se agarran a puñetes en plazas y terrenos baldíos. Tienen entre 14 y 17 años, son de colegios de elite y, se ponen de acuerdo para encontrarse y luchar, uno a uno, frente a sus grupos de amigos. Hay códigos de silencio que nunca rompen y reglas que no se transgreden. Así se validan entre sus pares, pero los expertos alertan que están legitimando una forma violenta de resolver problemas. Por J.M. Jaque/L. Gajardo/J. Zamora, La Tercera Santiago (15) no es de los que arruga. Cuando supo que un tipo de otro colegio estaba amenazando a un compañero de colegio, lo buscó por Facebook y le mandó un mensaje privado: "Fui yo el que te molestó en la fiesta. Si querís meterte con alguien, métete conmigo". El desafío estaba lanzado: un "mano a mano con piño". Así se llama en la jerga adolescente esta especie de duelo, donde dos antagonistas se ponen de acuerdo para juntarse a arreglar sus diferencias a puñetes.
Asociación de Padres de Familia del Instituto de Humanidades Luis Campino | Santiago de Chile